Es un problema muy frecuente en las personas. El apiñamiento dental consiste en un incorrecto posicionamiento y alineación de los dientes. Ocurre cuando en la boca no tenemos suficiente espacio para todas las piezas dentales. El apiñamiento puede ser leve, moderado o grave, dependiendo de cada paciente.
Es una patología que afecta de igual forma a niños y adultos y su tratamiento, por lo general, es la ortodoncia.
¿Tienes apiñamiento dental y quieres saber sobre sus causas y consecuencias? ¡Quédate leyendo el post!
Causas del apiñamiento dental
El apiñamiento dental puede ser multifactorial. Se pude deber a:
- Factores genéticos: si tienes algún familiar con este problema, tendrás más predisposición a tener apiñamiento dental.
- Haber perdido los dientes de leche demasiado rápido a temprana edad: si caen de forma prematura, puede afectar a la posición de los dientes definitivos.
- Uso prolongado del chupete en la niñez: ya sea el uso del chupete o chuparse el dedo, puede influir en el desarrollo del apiñamiento dental con el paso de los años. Destacamos la importancia de acudir con tu hij@ al ortodoncista para evitar el desarrollo de estas patologías de forma temprana.
- Factores independientes del desarrollo de cada persona: si has llevado ortodoncia, pero después no has seguido un correcto mantenimiento, es muy probable que tus dientes vuelvan a su posición natural. Es importante seguir las pautas del odontólog@ y hacer uso de los retenedores para que tus dientes se queden en la posición conseguida por la ortodoncia.
- Erupción de las muelas del juicio: cuando salen las muelas del juicio, pero no tenemos suficiente espacio en nuestra boca, estas pueden empujar el resto de dientes para obtener ese espacio. En muchos casos, ese empuje acaba ocasionando apiñamiento dental.
Tipos de apiñamientos
Dependiendo de sus causas, el apiñamiento será categorizado de una forma u otra. Existen tres tipos:
- Apiñamiento primario: este tipo de apiñamiento es el que se corresponde con las causas genéticas.
- Apiñamiento secundario: por su parte, el secundario es el causado por los hábitos del paciente, como pueden ser el uso continuado del chupete o la succión del dedo. Este tipo de apiñamiento también recoge a aquel causado por la pérdida prematura de los dientes de leche.
- Apiñamiento terciario: este es el causado por la erupción de las muelas del juicio, por el envejecimiento y por la remodelación de los huesos maxilares.
¿Estás ante una de estas situaciones? Es importante ponerle tratamiento al apiñamiento dental. De no hacerlo, puedes sufrir alguna de las consecuencias que expondremos a continuación.
Consecuencias del apiñamiento dental
La consecuencia más visible del apiñamiento dental es la estética, ya que la sonrisa no se ve alineada ni armónica. Sin embargo, esta no es la más importante. El apiñamiento dental puede conllevar problemas en tu salud bucodental.
En primer lugar, causa problemas de higiene dental. Al estar unos dientes por encima de los otros, existen zonas a las que es difícil acceder con el cepillo de dientes en la higiene bucodental diaria. La placa bacteriana se acumula y, si no se limpia debidamente, se puede convertir en sarro y producir inflamaciones en la encía o enfermedades periodontales.
Otro problema que puede derivar de la falta de higiene dental son las caries. Además, la presencia de esta patología hace que el paciente esté mucho más predispuesto a desarrollar enfermedades periodontales.
El apiñamiento también puede ocasionar problemas de oclusión. Al no haber una correcta alineación y posición, los dientes no hacen bien la función que les corresponde hacer. De este modo, habrá piezas dentales que se sobrecargarán y la mandíbula se tensará. Así es como se producen los desplazamientos dentales que pueden afectar a la mandíbula y los huesos de nuestra boca. Si nuestra boca no encaja correctamente cuando la cerramos, puede haber dolor y malestar a largo plazo.
¿Tienes apiñamiento dental? Pide cita en nuestra clínica.
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